Con
la música, una vez más, me reafirmé en la idea de que estamos hechos para crear
melodías de encuentros, harmonías que entrelazan culturas, ideas, sentidos,
pensamientos, credos, corazón y alma.
Las
barreras y los miedos, las defensas que nos definen excluyendo no es lo que nos
hace humanos. Estamos hechos para crear armonías que se expresan sin imponerse,
que se comparten sin necesidad de defender verdad alguna, que discrepan porque
somos diferentes pero que no necesitan afirmase, ni afirmarnos, a costa del
otro.
Lo
curioso es que mientras volvía para casa me vinieron a la memoria unos versos
de Joan Báez, y no de Pablo Milanés: " Cantar es amar y afirmar, volar y
elevarse, introducirse en el corazón de la gente que te escucha. Decirles que
la vida es para vivirla, que el amor existe, que la belleza existe y que debe ser
buscada y hallada"
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